Ryanair

Que no se diga nunca que los españoles no saben salir de fiesta. Y el lugar de la fiesta es la feria anual.  Cada pueblo y ciudad (y algunos barrios de la ciudad) tiene la suya, pero una de las más grandes y famosas es la Feria de Abril de Sevilla. Dos semanas después de la Semana Santa, la gran fiesta religiosa que precede a la Pascua, la feria es una celebración casi pagana de la primavera, en la que se trata de pasar un buen rato. Este año, las fechas oficiales son del martes 21 al domingo 26 de abril, aunque en realidad todo comienza el día anterior, hasta el alumbrado, en la medianoche del lunes.

Pero la feria no es sólo para pasarlo bien, también es una tradición, aunque, como muchas otras, no es tan antigua como podría pensarse. La primera Feria de Abril se celebró en 1847 (vale, es antigua, pero no tanto como El Jueves o la Vela de Santa Ana) en el Prado de San Sebastián, y fue inicialmente una feria de caballos y ganado que era una especie de versión modernizada de las ferias medievales. Se trasladó a su ubicación actual, un recinto construido a tal efecto en el extremo sur del barrio de Los Remedios, en 1973 (en la memoria viva, por lo que apenas es una tradición), momento en el que el ganado ya había desaparecido y la feria había desarrollado el carácter que tiene en la actualidad.

Renfe

El excelente y extenso sistema ferroviario español conecta ciudades de toda España y de los países vecinos. Los trenes AVE de Renfe pueden alcanzar velocidades de hasta 350 km/h, lo que hace que los viajes entre las principales ciudades sean muy eficientes. Todos los trenes de media y larga distancia requieren una reserva de asiento; la venta de billetes para estos trenes suele abrirse entre 30 y 60 días antes del viaje. La mayoría de los trenes de Renfe tienen dos clases: Turista (2ª clase) y Preferente (1ª clase), aunque algunos trenes AVE ofrecen Turista Plus. Hay WiFi gratuito para los pasajeros de Preferente y para los que tienen la tarjeta de fidelidad +Renfe.

Blablacar

Por su posición estratégica en el extremo sur de Europa, Sevilla ha sido siempre un crisol cultural, una encrucijada de caminos, un puerto de salida y llegada de grandes viajes y descubrimientos. Hoy en día, Sevilla es un importante centro de comunicaciones que conecta la provincia con el resto del mundo. Siempre hay un medio de transporte público que le llevará a su destino. Y hay numerosas opciones en los pueblos y en la ciudad de Sevilla.

El aeropuerto internacional de San Pablo es el segundo más transitado de Andalucía, con cinco millones de pasajeros al año. Su proximidad a los aeropuertos de Jerez de la Frontera, Málaga y Faro (Portugal) aumenta las posibilidades de encontrar vuelos a prácticamente cualquier parte del mundo.

Viajar en AVE hasta la estación de Santa Justa es una forma ideal de llegar al centro de Sevilla. El AVE llega a Madrid en dos horas y media, a Córdoba en menos de 45 minutos, a Barcelona en cinco horas y media y a Valencia en cuatro horas. Además, la red, cada vez más extensa, incluye conexiones con otras ciudades españolas y también europeas, como París. Las líneas de media distancia son otra opción atractiva para viajar a Sevilla desde distintos puntos de Andalucía, o los trenes de cercanías para moverse por la provincia.

De Cádiz a Sanlúcar de Barrameda

Sevilla es la capital de Andalucía y el centro cultural y financiero del sur de España. Ciudad de poco más de 700.000 habitantes (1,6 millones en el área metropolitana, lo que la convierte en la cuarta ciudad de España), Sevilla tiene mucho que ofrecer al viajero.

Los trenes de alta velocidad son estupendos si el tiempo es esencial, a menos de una hora de la maravillosa ciudad de Córdoba, y a menos de tres horas de Madrid a Sevilla. Sin embargo, los trenes más lentos siguen siendo una ganga, y hay un tren nocturno que va de Barcelona a Sevilla en menos de 11 horas.

El servicio de autobuses español es sorprendentemente puntual y cómodo, y la mayoría tiene aire acondicionado y aseo. Aunque no lo crea, para llegar a Sevilla desde otras ciudades de España a veces puede ser mínimamente más largo que el tren (pero mucho más barato). Compruebe primero sus opciones en el útil mostrador de información que encontrará dentro de cualquier terminal. Los autobuses circulan con regularidad hacia/desde la mayoría de las ciudades importantes, saliendo bien de la estación de autobuses de Plaza de Armas, cerca del río, o de la estación del Prado de San Sebastián, cerca de la Universidad/Santa Cruz.