Un artículo de Wikipedia, la enciclopedia libre. Una enfermedad mental es una condición que perturba el pensamiento, los sentimientos o el comportamiento de una persona de una manera lo suficientemente fuerte como para dificultar su integración social o causarle sufrimiento. Forma parte del campo de estudio y práctica de la psiquiatría, la psicopatología, el psicoanálisis y ciertas ramas de la psicología. Trastornos del estado de ánimo, alteración grave del sueño. Alteración de la personalidad. Comportamiento antisocial y ruptura de relaciones. Trastornos del juicio (cognitivo y de toma de decisiones). Los límites de la enfermedad mental son a veces subjetivos y están condicionados por la tolerancia que tiene una sociedad en relación a las desviaciones en la forma de comportamiento o de estar ahí. Alteración de la percepción de la realidad, alucinaciones. Otro límite subjetivo, también notamos que muchos hombres considerados como genios presentan todos los síntomas de la enfermedad mental y, quizás, hoy en día, permanecerían en un hospital psiquiátrico. Así, y por ejemplo, en el mundo occidental, la homosexualidad ha sido durante mucho tiempo una enfermedad mental. Esta imprecisión es aprovechada por los regímenes totalitarios para justificar el internamiento de opositores políticos. Hablamos de borderline o personalidad borderline para designar a las personas que logran presentar una apariencia de “normalidad”, a pesar de ciertos rasgos relacionados con la psicosis, pero la cuestión es mucho más compleja. La mortalidad anual por suicidio alcanzaría casi las 60.000 personas al año en Europa, más que la mortalidad por accidente de tráfico. La enfermedad mental es la causa más importante de discapacidad en todo el mundo. A menos que veamos síndromes iatrogénicos, es decir, enfermedades creadas desde cero por el terapeuta, esto parece implicar una influencia social en la formación de enfermedades. Esta influencia es estudiada por la etnopsiquiatría. Las discapacidades intelectuales y los trastornos neurológicos como la epilepsia o la parálisis cerebral no son enfermedades mentales. 2ª causa de muerte entre adolescentes y 1ª entre 25-35 años. Neurosis y psicosis son dos tipos de estructuras radicalmente diferentes que se encuentran en la enfermedad mental (paradigma de lo observable), pero cabe señalar que el llamado campo neurótico es concomitante, en paradoja intrínseca, al funcionamiento de la persona psicótica. Las psicosis son trastornos graves que alteran la personalidad. En la crisis de locura particularmente, las facultades de procesamiento de lo perceptible son deficientes, así como el juicio de la persona en su razonamiento lógico considerablemente disminuido (razonamiento deteriorado). Neurosis, o más bien síntomas neuróticos, que son afecciones nerviosas. Hay una construcción estructural en ya través de lo imaginario. Incluye especialmente fobias, pero también histeria y neurosis obsesivas (principalmente TOC). Estos trastornos no son enfermedades en sentido estricto, sino que constituyen un caldo de cultivo para el desarrollo de determinados trastornos mentales (por ejemplo, la personalidad paranoide está ligada al desarrollo de una psicosis paranoide, sin que ésta sea sistemática). Ley del 27 de junio de 1990 del código de salud pública de Francia: esta ley se refiere a los derechos y la protección de las personas hospitalizadas a causa de sus trastornos mentales y su condición de hospitalización. ↑ ab Wang PS, Aguilar-Gaxiola S, Alonso J y Als. Benjamin Ball, Lecciones sobre enfermedades mentales, Ed.